Don Pantuflo Zapatilla

Que parece ser que el esquema táctico de la Selección Española (también conocida como La Roja, anuque no por mí) es inamovible, cual rompeolas costero, que soporta los envites de una naturaleza indomable. Que el querido Don Pantuflo Zapatilla sigue empeñado en hacer jugar a Torres y desplazar a David Villa a la banda, haciendonos perder efectividad y mordiente ofensiva, y empeñado en hacer compartir a Alonso y a Busquets una parcela de terreno sobreexplotada, haciendo que el ritmo de juego disminuya, porque ninguno de los dos son creadores de juego natos.

Tiene suerte Del Bosque de haber conseguido la hazaña de alcanzar las semifinales de un Mundial por primera vez en la historia. Porque de no haber sido así, toda la prensa, y por ende, los aficionados se le hubieran echado encima quejándose de su tardía reacción para hacer los cambios, y la cabezonería de insistir con Torres cuando no está al nivel que debiera, por la lesión sufrida hace no tanto tiempo. Por seguir sin incluir a Cesc n los titulares, cuando es el único jugador, junto con Iniesta y Xavi, que saben dirigir un equipo, saben llevar el ritmo de un partido, tienen llegada, y calidad para resolver un partido. Que entiendo que contra Alemania, jueguen de inicio Busquets y Xabi Alonso, por el poderío aleman en el centro del campo, con Özil, Schwensteiger, Müller (aunque no juegue) y Khedira. Pero que contra Paraguay, Suiza, Honduras, que son equipos de perfil más bajo que el nuestro, y donde deberíamos confiar en nuestras aptitudes, y tratar de ganar teniendo el balón y marcando 3, o 4 goles, hemos tenido problemas a la hora de que el balón fluya en ataque.

Y que no se me malinterprete. Confío en esta selección, aunque el juego desplegado no sea el mismo que el que maravilló a todo un continente hace 2 años. Porque una vez llegados hasta aquí, como para no confiar. Y está claro que sea el resultado que sea el del miércoles, todos los que animamos a la selección deberemos estar orgullosos, porque por fin, hemos dejado atrás a los fantasmas, y nos hayamos dejado de gafes. Y el miércoles tendremos una batalla por todo lo alto, con un rival enfrente como Alemania, que está en su ambiente (recordad la frase de Gary Lineker: "El futbol es un deporte en el que juegan once contra once, y siempre gana Alemania") y que, por lo menos, intentará jugar al fútbol, y no a cerrarse en su área y esperar al contraataque. Y en mi opinión, eso favorece a todo el mundo. A Alemania, porque se libra de un cerrojazo, a nosotros por lo mismo, porque nos permitirá jugar mejor, salvo por la presión descomunal de Özil y Schwensteiger en mediocampo, y a los aficionados al fútbol en general, porque veremos a dos selecciones que han desplegado un gran fútbol, quizás Alemania más que España.

Ayer, día histórico para el fútbol español, Manolo el del Bombo no pudo asistir al campo, debido a una enfermedad. Curiosamente, por fin pasamos de cuartos. Ahora ha prometido estar en Sudáfrica el miércoles para darlo todo. Esperemos que no se le quede el sambenito de gafe si por lo que sea, España cae eliminada. Tengo ganas de ver este partido.

Sólo espero que los jugadores se solidaricen con Zapatero. A fin de cuentas, puede ser en lo único que nuestro querido presidente gane a Ángela Merkel. En eso, y en la longitud de las listas de desempleo, claro.