Echan redes a las redes.

El Reino Unido, la Pérfida Albión, país de futbol, la música punk, el trafico en sentido contrario, y, a partir de ahora, gente que usa el P2P apuntada en listas como si allí, en lugar de mandar el que vive en el numero 10 de Downing Street, gobernase la Gestapo. Y es que, como si de una clase de primaria se tratase, ahora, al que se porte mal le van a apuntar en la pizarra, para chivarse a la seño.

¿Que porque digo esto? Muy sencillo. Resulta que la sombra de Margaret Tatcher y su férrea (casi fascista, podríamos decir) manera de llevar los problemas es alargada. A partir de ahora, todo aquel que utilice redes P2P para bajarse el último disco de Franz Ferdinand (o lo que sea que escuchen los hijos de la Gran Bretaña), será apuntado en una lista, y sus datos podrán ser reclamados por la discográfica o distribuidora para emprender acciones legales. Pero no acaba ahí el tema. Porque, por si no fuera suficiente, además, apuntaran el número de veces que hay una descarga ilegal. Es decir, que aparte de tus datos, pondrán palitos por cada archivo descargado.

David Bravo, abogado oriundo de Sevilla, y el mayor experto de este país en el tema de las descargas, supongo que tendrá algo que decir. Y lo dirá, como tiene costumbre. Pero no sé si Inglaterra tiene a alguien como él. Así que pueden tener serios problemas. Aunque también es cierto que ellos no creo que tengan una Belén Esteban, y nosotros tenemos, aparte de eso, a un Jesús Janeiro, una Campanario, y sus familiares, así que creo que sobrevivirán.

Sin embargo, yo quiero hacerles una recomendación a todos los seguidores del God Save the Queen (que no creo que ninguno me lea, pero en fin), y es que borren de su ordenador el eMule, el Kazaa, el Ares, y todo aquel programa que utilice P2P. Porque, a fin de cuentas, está cayendo en desuso, y yo, personalmente, odio cuando me descargo un archivo y luego es porno. Además, que dependes de otras personas para descargarte los archivos. Por eso yo, que soy bastante egoísta con estos temas, prefiero los archivos en descarga directa. Taringa, Seriesyonkis, y ese tipo de páginas son las más útiles, y las preferidas por millones de usuarios. Y, además, no es tan sencillo obtener los datos de quien realiza las descargas.

Pero, al fin y al cabo, también podrían censurar internet, como se hace en China, y tan tranquilos. Seguro que de esa manera, nadie se descarga nada, y la gente acude en masa a comprarse el disco de Justin Bieber por 20 euros. Que debemos pagar un precio justo por el arte. No te jode.